De pie,
con los pies juntos, levanta los los brazos por encima de la cabeza, une
las palmas. SI te resulta más cómodo cruza los pulgares.
Al inhalar da un
paso hacia adelante de unos 30 cm. con el pie izquierdo. Lleva la punta
del pie derecho hacia atrás y deja este con suavidad en el suelo detrás de
ti. Mantén el talón levantado.
Fija la mirada en
un punto a poca distancia en el suelo. Al exhalar deja que el torso se
incline hacia adelante desde las caderas levantando simultáneamente la
pierna derecha, mantenla extendida detrás de ti y los brazos estirados al
frente. Las caderas han de estar niveladas. Visto lateralmente el cuerpo
adopta la forma de una "T".
Si te resulta difícil mantener el equilibrio apoya ligeramente los dedos
en el respaldo de una silla o sobre una estantería.
Respira con normalidad y mantente así durante 10 segundos.
Baja la pierna derecha y eleva los brazos para volver a la postura
inicial. Comprueba que no estés cuadrando los hombros.
Repítelo hacia el otro lado.
Ejecuta una vez más la postura hacia cada lado. |