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Con
el estiramiento, desentumeces la nuca y los hombros sintiendo un alivio en
las tensiones musculares de esa zona. Fortaleces el abdomen.
Tumbado en el suelo, cogerás aire y llevarás las manos al final de tu
cabeza llevando el mentón al pecho, expulsarás el aire vaciando tus
pulmones. Mantén la postura unos segundos.
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Variante (sesión prenatal)
En lugar de
hacer elevaciones de piernas tumbada boca arriba o ejercicios similares
para fortalecer el abdomen, puedes tenderte de espaldas con los pies
apoyados en el suelo junto a las caderas y entrecruzar los dedos de las
manos detrás de la cabeza. Inspirando, levanta cabeza y hombros y gira
hacia la izquierda; baja espirando y repite igual hacia la derecha. Hazlo
unas cinco veces a cada lado. Fortalecerás así los músculos abdominales
sin imponerles sobreesfuerzo. |
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