Este gran Sutra
Mahayana generalmente es conocido como Sutra de Amitabha, y es recitado
diariamente en muchos monasterios.
La repetición Namo
Buddha Amitabha (sánscrito) o Namo Amitofo (chino),lo cual suele
traducirse como "rindo homenaje al Buddha Amitabha",tiene grandes
beneficios y es practicada por millones de creyentes, siendo parte de la
práctica de quienes desean nacer en la Tierra Pura de Suprema felicidad,
del Oeste, del Buddha Amitabha.
Plegaria
para la Ofrenda de incienso
El
incienso arde en los incensarios,
se difunde su fragancia en el reino del Dharma.
Todos los Buddhas de la asamblea, extensa como el mar,
lo perciben a lo lejos.
Las nubes que se forman son auspiciosas,
mientras
pedimos con un corazón sincero y honesto,
que todos los Buddhas se manifiesten.
Homenaje al Bodhisattva Mahasattva
Pabellón de Nubes de Incienso. (3 veces)
Verso de Apertura de
Sutras
El
Dharma insuperable, profundo,
insondable, sutil y maravilloso,
es difícil de hallar aun en cientos de miles
de millones de períodos cósmicos
Yo ahora lo veo, lo oigo, lo encuentro
lo
recibo y conservo
Hago el voto de comprender el sentido
real y verdadero del (la enseñanza) Tathagata.
Buddha Predicó el Sutra de Amita
Tal yo
he oído. En cierto tiempo, Buddha moraba en Sravasti, en la Arboleda de
Jeta, en el parque de Anathapindika (Bienhechor de huérfanos y
desamparados), con una gran asamblea de mil doscientos cincuenta
bhikshus. Todos ellos grandes arhats, conocidos y reconocidos
por todos. Los ancianos Shariputra,
Mahamaudgalyayana, Mahakashyapa, Mahakatyayana, Mahakaushthila,
Revata, Shuddhipanthaka, Nanda, Ananda, Rahula, Gavampati,
Pindolabharadvaja, Kalodayin,
Mahakapphina, Vakkula, Aniruddha y otros como
ellos; todos grandes discípulos. Junto con los Bodhisattvas Mahasattva:
Manjushri –Príncipe
del Dharma–, el Bodhisattva Ajita, el Bodhisattva Gandhahastin, el
Bodhisattva Nityodyukta y otros semejantes, todos grandes Bodhisattvas; y
con Shakra, el principal entre los dioses, y grandes multitudes ilimitadas
de todos los cielos.
En
aquel tiempo, Buddha dijo al Anciano Shariputra: “Desde aquí hacia el
Oeste, atravesando decenas de millones de tierras de
buddha, existe un
mundo llamado ‘Suprema Felicidad’. En esa tierra hay un Buddha llamado
Amita, quien ahora está predicando el Dharma.
Shariputra. ¿Por qué esa tierra se llama ‘Suprema Felicidad’?
En
aquél país no hay seres que sufran, los seres sólo gozan de toda clase de
felicidad, por eso se llama ‘Suprema Felicidad’. Además, Shariputra, la
Tierra de Suprema Felicidad está completamente rodeada por siete filas de
barandas, siete cortinajes de redes decorativas y siete hileras de
árboles, todos formados de los cuatro tesoros. Por eso, aquél país se
llama Suprema Felicidad.
Además, Shariputra, la Tierra de Suprema Felicidad tiene estanques hechos
de las siete joyas, llenos con agua de las ocho cualidades meritorias.
El
fondo de los estanques es puro, cubierto con arena de oro. En los cuatro
lados hay escaleras de oro, plata, lapislázuli y cristal. Arriba hay
pabellones adornados con oro, plata, lapislázuli, cristal, nácar, perlas
rojas y ágatas. Estos adornos son así de meritorios.
En los
estanques hay flores de loto grandes como ruedas de carruaje: verdes que
irradian luz verde, amarillas que irradian luz amarilla, rojas que
irradian luz roja y blanca que irradian luz blanca. Son sutiles y
maravillosas, perfumadas y puras.
Shariputra, la Tierra de Suprema Felicidad está realizada majestuosamente
de ese modo meritorio.
Además, Shariputra, en aquella tierra de Buddha permanentemente se ejecuta
música celestial y el suelo es de oro. Durante los seis períodos del día y
de la noche cae una lluvia celestial de flores mandarava.
En
aquella tierra, por la clara mañana, los seres utilizan sacos para recoger
las maravillosas flores, para ofrendarlas a decenas de millones de Buddhas
de otras direcciones. A la hora de comer regresan a su país, y luego de
comer, pasean.
Shariputra, la Tierra de Suprema Felicidad está realizada majestuosamente
de ese modo meritorio.
Además, Shariputra, en aquél país hay siempre toda clase de aves
maravillosas de variados colores: grullas blancas, pavos reales, loros,
garzas reales, kalavinkas y aves de dos cabezas. Estas bandadas de
aves, durante los seis períodos del día y de la noche, emiten sonidos
armoniosos y elegantes. Estos sones proclaman claramente las cinco raíces,
los cinco poderes, los siete factores de la Bodhi, las ocho divisiones del
sendero de los sabios y otros Dharmas semejantes a estos.
Al oír esos sones, los seres de aquella tierra son plenamente
conscientes del Buddha, del Dharma y del Sangha.
Shariputra, no digas que estas aves han nacido así como retribución por
sus faltas. ¿Por qué? En aquella tierra de
buddha no existen
los tres malos caminos.
Shariputra, si en aquella tierra de
buddha no existen
los nombres de las malos caminos, ¡cómo podrían existir estos en realidad!
Estas
bandadas de aves fueron creadas por transformación por el Buddha Amita,
deseando difundir extensamente el son del Dharma.
Shariputra, en aquella tierra de
buddha sopla una
ligera brisa, que agita las hileras de árboles y redes enjoyados,
produciendo sonidos sutiles y maravillosos, como si se tocaran cientos de
miles de acordes musicales a un mismo tiempo. Estos sones hacen que
naturalmente (quienes los escuchan) sean plenamente conscientes del Buddha,
del Dharma y del Sangha.
Shariputra, aquella tierra de
buddha está
realizada majestuosamente de ese modo meritorio.
Shariputra. ¿Tú qué piensas? ¿Por qué aquél Buddha se llama Amita?
Shariputra, el brillo de aquél Buddha es ilimitado, ilumina las tierras de
las diez direcciones sin ningún impedimento. Por eso se llama Amitabha
(Luz Infinita).
Además, Shariputra, la duración de la vida de aquél Buddha y la de su
pueblo se extienden por inconmensurables e ilimitados asamkhyeya kalpas.
Por eso se llama Amitayus (Vida Infinita).
Shariputra, Amita alcanzó la Budeidad hace diez kalpas. Además,
Shariputra, aquél Buddha tiene inconmensurables e ilimitados shravakas,
todos arhats; un número incalculable que no se podría conocer. Así
de numerosa es también la asamblea de Bodhisattvas.
Shariputra, aquella tierra de Buddha está realizada majestuosamente de ese
modo meritorio.
Más
aún, Shariputra, todos los seres vivientes nacidos en la Tierra de Suprema
Felicidad son avaivarticas. Entre ellos hay muchos que pueden
alcanzar en esa vida la Budeidad. Su número es extremadamente grande, no
pudiendo ser conocido mediante
el cálculo, sólo podría expresarse en términos de inconmensurables
e ilimitados asamkhyeya kalpas.
Shariputra, quienes escuchen esto deberían realizar el voto: “Deseo nacer
en aquél país”. ¿Por qué? Porque de ese modo lograrían reunirse con todas
las personas superiores y buenas en ese lugar.
Shariputra, no se puede obtener el renacimiento en aquél país con pocas
buenas raíces, bendiciones, virtudes y conexiones causales.
Shariputra, si un buen hombre o una buena mujer escucha decir “Buddha
Amitabha” y sostiene firmemente su nombre, ya sea, un día, dos días, tres
días, cuatro días, cinco días, seis días o siete días, sinceramente y sin
distracción, cuando se acerque el fin de su vida, el Buddha Amita y todos
los seres santos aparecerán en ese momento frente a esa persona. Al llegar
su fin, con su mente libre de confusión, renacerá inmediatamente en la
Tierra de Suprema Felicidad del Buddha Amita.
Shariputra, veo este beneficio, por eso digo estas palabras: si existen
seres vivientes que escuchen estas palabras, es necesario que hagan el
voto: “Renaceré en aquella Tierra”.
Shariputra, así como yo ahora alabo el inconcebible beneficio de los
méritos y virtudes del Buddha Amita, en los mundos de Oriente también lo
hacen el Buddha Akshobhya, el Buddha Merudhvaja, el Buddha Mahameru, el
Buddha Meruprabhasa, el Buddha Sughosa y Buddhas semejantes a estos,
numerosos como las arenas del río Ganges. Cada uno en su tierra muestra la
apariencia de una vasta y larga lengua que cubre por entero los tres mil
grandes mundos y dice las palabras sinceras y verdaderas:
“Es
necesario que todos ustedes, seres vivientes, crean y alaben el
inconcebible mérito y virtud de este Sutra cuya recitación (atenta) es
protegida por todos los Buddhas”.
Shariputra, en los mundos del Sur están el Buddha Candrasuryapradipa, el
Buddha Yasahprabha,
el Buddha Maharciskamdha, el Buddha Merupradipa, el Buddha Arantavirya y Buddhas
semejantes a estos, numerosos como las arenas del río Ganges. Cada uno en
su tierra muestra la apariencia de una vasta y larga lengua que cubre por
entero los tres mil grandes mundos y dice las palabras sinceras y
verdaderas:
“Es
necesario que todos ustedes, seres vivientes, crean y alaben el
inconcebible mérito y virtud de este Sutra cuya recitación (atenta) es
protegida por todos los Buddhas”.
Shariputra, en los mundos de Occidente están el Buddha Amitayus, el Buddha
Amitaskamdha,
el Buddha Amitadhavaja, el Buddha Mahaprabha, el Buddha Maharasmiprabha,
el Buddha Maharatnaketu, el Buddha Suddharasmi y Buddhas semejantes
a estos, numerosos como las arenas del río Ganges. Cada uno en su tierra
muestra la apariencia de una vasta y larga lengua que cubre por entero los
tres mil grandes mundos y dice las palabras sinceras y verdaderas:
“Es
necesario que todos ustedes, seres vivientes, crean y alaben el
inconcebible mérito y virtud de este Sutra cuya recitación (atenta) es
protegida por todos los Buddhas”.
Shariputra, en los mundos del Norte están el Buddha Maharciskamdha, el
Dumdubhisvaranirghosa el Buddha Duspradharsa, el Buddha Adityasambhava, el
Buddha Jalemiprabha y Buddhas semejantes a estos, numerosos como las
arenas del río Ganges. Cada uno en su tierra muestra la apariencia de una
vasta y larga lengua que cubre por entero los tres mil grandes mundos y
dice las palabras sinceras y verdaderas:
“Es
necesario que todos ustedes, seres vivientes, crean y alaben el
inconcebible mérito y virtud de este Sutra cuya recitación (atenta) es
protegida por todos los Buddhas”.
Shariputra, en los mundos de abajo (nadir), están el Buddha Simha, el
Buddha Yasas, el Buddha Yasahprabha, el Buddha Dharma, el Buddha
Dharmadhvaja, el Buddha Dharmadhara y Buddhas semejantes a estos,
numerosos como las arenas del río Ganges. Cada uno en su tierra, muestra
la apariencia de una vasta y larga lengua que cubre por entero los tres
mil grandes mundos y dice las palabras sinceras y verdaderas:
“Es
necesario que todos ustedes, seres vivientes, crean y alaben el
inconcebible mérito y virtud de este Sutra cuya recitación (atenta) es
protegida por todos los Buddhas”.
Shariputra, en los mundos de arriba (cenit) están el Buddha Brahmaghosa,
el Buddha Naksatraraja, el Buddha Gamdhottama, el Buddha Gamdhaprabhasa,
el Buddha Maharciskamdha, el Buddha Ratnakusumasampuspitagatra, el Buddha
Salendraraja, el Buddha Ratnotpalasri, el Buddha Sarvarthadarsa, el Buddha
Sumerukalpa y Buddhas semejantes a estos, numerosos como las arenas del
río Ganges. Cada uno en su tierra, muestra la apariencia de una vasta y
larga lengua que cubre por entero los tres mil grandes mundos y dice las
palabras sinceras y verdaderas:
“Es
necesario que todos ustedes, seres vivientes, crean y alaben el
inconcebible mérito y virtud de este Sutra cuya recitación (atenta) es
protegida por todos los Buddhas”.
Shariputra, ¿Tú qué piensas? ¿Por qué se llama “Sutra cuya recitación
(atenta) es
protegida por todos los Buddhas”?
Shariputra, si hay un buen hombre o una buena mujer que escucha este Sutra
y lo recibe y mantiene, y que escucha el nombre de todos los Buddhas, este
buen hombre (atento) o
esta buena mujer (atenta)
será quien esté protegido por todos los Buddhas. Alcanzará sin retroceder,
sin cambiar, la Suprema y Perfecta Iluminación (annuttara-samyak-sambodhi).
Por eso, Shariputra, todos ustedes deberían creer, confiar en y aceptar
mis palabras y las que hablan todos los Buddhas.
Shariputra, si existen personas que ya han realizado el voto, que ahora
realicen el voto, o que realizarán el voto “Deseo nacer en aquél país del
Buddha Amita”, todas estas personas alcanzarán sin retroceder, sin
cambiar, la Suprema y Perfecta Iluminación, ya sea que hayan nacido, que
estén naciendo, o que vayan a nacer en aquella tierra. Por esta razón,
Shariputra, todo buen hombre o buena mujer, si tiene
fe, debería hacer el voto de nacer en aquél país.
Shariputra, así como yo alabo los inconcebibles méritos y virtudes de
todos los Buddhas, todos estos Buddhas alaban mis inconcebibles méritos y
virtudes y dicen estas palabras: “El Buddha Shakyamuni es capaz de
realizar cosas extremadamente difíciles y raras. En el mundo saha,
en la mala época de las cinco turbiedades: en medio de la turbiedad del
kalpa, la turbiedad de los puntos de vista erróneos, la turbiedad de
la aflicción, la turbiedad de los seres vivientes y la turbiedad de la
vida, es capaz de alcanzar la Suprema y Perfecta Iluminación y ayudar a
todos los seres vivientes predicando este Dharma, que es difícil de creer,
extremadamente difícil de ser creído por todos”.
Shariputra, debes saber que yo, durante la mala época de las cinco
turbiedades, logré realizar esta difícil tarea de alcanzar la Perfecta y
Suprema Iluminación y predicar el Dharma, que para todo el mundo es
difícil de creer. Es una tarea verdaderamente muy difícil.
Después de que Buddha predicó este Sutra, Shariputra y todos los
bhikshus, devas, seres
humanos, asuras y otros seres semejantes de todos los mundos que
escucharon lo que Buddha dijo, se alegraron lo aceptaron con fe, le
hicieron reverencia y se retiraron
Buddha
habló el Sutra de Amita. |