Poemas
de Trengo Terchen Sherab Oser
1.-
Generosidad
(en
sánscrito: dana; en tibetano: chinpa)
A
cualquiera, cuanto necesite, la generosidad de la riqueza
a los que
siguen el Dharma, la generosidad de la enseñanza excelsa
a los que se
hallan bajo distintos miedos, la generosidad de la protección
seamos
siempre capaces de brindar estas tres clases de generosidad.
2.- Autodisciplina
(en
sánscrito: shila; en tibetano: tsultrim)
Deja atrás
los altibajos de los vicios
entra en la
vastedad de la virtud
por el bien
de los demás
mantén
siempre la disciplina perfecta.
3.-Paciencia
(en
sánscrito: kshanti; en tibetano: sopa)
Sé compasivo
con todos aquellos que obran mal
y entrégate
con gozo a la práctica del Dharma
sin temer el
significado de la vacuidad profunda
practica la
paciencia de gran utilidad.
4.-Esfuerzo sin esfuerzo
(en
sánscrito: virya; en tibetano: tsontru)
Viste la
armadura del gozo de la virtud extensa
el mismo
modo, implícate en la intención y su aplicación
sin
desanimarte, imperturbable, sin satisfacción
día y noche,
emprende el esfuerzo sin esfuerzo hacia la virtud.
5.-Meditación
(en
sánscrito; dhyana; en tibetano: samten)
Tranquila y
alegremente en la percepción directa
aumenta
progresivamente las grandes cualidades
haz el bien
por los demás al comprender su naturaleza
preserva con
perseverancia el significado de la meditación.
6.-Sabiduría
(en
sánscrito: prajña; en tibetano: sherab)
Comprende
toda verdad relativa como un espejismo
descubre la
verdad, como el cielo, libre de toda complicidad
y, en
particular, aquella que permite hacer el bien por los demás
posee la
sabiduría de la escucha, la meditación y la contemplación.
La Prajñaparamita se
considera como un cuerpo de enseñanzas y desde un punto de vista
filosófico también designa la práctica de la meditación de la visión de la
naturaleza absoluta. Las seis Paramitas o “Las seis Perfecciones”,
paramita significa “hacia la otra orilla”, representan el puente que hay
que cruzar para pasar de la orilla del samsara y la confusión, hacia la
otra orilla, el estado de iluminación. De este modo representan las
prácticas principales del bodhisattva.
La práctica de la
meditación representa la unión de la quinta paramita (smaten), la
meditación y la sexta (prajna), la sabiduría de la vacuidad. Con el fin de
guiar a bodhisattva fuera de la meditación solitaria, cuando éste se halla
en la sociedad por el bien de los demás, el Buda enseño las tres primera
paramitas, que afectan en sí y se fundamentan en la bondad y la compasión.
La cuarta paramita, el esfuerzo sin esfuerzo, se considera un soporte
esencial tanto para las paramitas no-meditativas como para las de
meditación en sí. |